Portugal es un país fascinante lleno de rincones bonitos y pueblos preciosos que dejan sin aliento a cualquier persona amante de los enclaves singulares. Monsanto, muy cercano a la frontera, enfrentado geográficamente con Extremadura, es uno de esos pueblos de los que has escuchado hablar un montón de veces y que al final te animas a visitar. Lo que encuentras supera las expectativas.