Viaje fotográfico a Mosqueruela

Hay sitos que te sacan muchas palabras, cientos, miles de ellas. Hay otros sitios en los que las palabras no salen pero si salen imágenes significativas. Mosqueruela, en Teruel, es uno de esos lugares que hace que las palabras no me salgan, pero sí que las imágenes emanen a decenas. Hoy quiero llevaros de viaje fotográfico a Mosqueruela.

Mosqueruela es un pequeño pueblo de la comarca ´Gúdar-Javalambre en Teruel que tiene aires de fortaleza y, todavía hoy nos recuerda a una de ellas gracias a sus torres, a sus puertas fortificadas, a los restos de muralla y a lo recogido de su casco histórico, que se cierra sobre sí mismo como una cáscara de nuez.

Mosqueruela es plaza con porches, con iglesia de dimensiones considerables. Es también lugar de palacios, de esos palacios turolenses con artesonado increíble en lo más bajo de los tejados. Mosqueruela, también, es cuestas, callejuelas, puertas ajadas de madera, algunas flores – incluso en enero – y mucha paz, casi demasiada. Y es que Mosqueruela es otro de esos lugares representativos de la España Vaciada de la que tanto se habla en estos tiempos, y que solo recordamos cuando nos vemos apurados en nuestra existencia vacía y temerosa.

En sus calles encontramos un antiguo hospital, del s. XVI, en estilo gótico-renacentista, con la sillería encalada – así está casi todo el pueblo – y una portada de medio punto. Sobre ésta, un escudo con una fecha: 1557. Dicen que su interior se encuentra en un estado aceptable, con los elementos originales como la escalera o la cocina, esto es, que datan de la época renacentista. No sé si será cierto, yo no lo he podido ver.

En las calles de Mosqueruela encontramos también un edificio conocido como el Palacio de Don Jaime, fechado en los siglos XIV y XV. Este edificio es gótico, de mampostería y con cornisa de madera. En su fachada un arco de medio punto, sus ventanales están enmarcados en sillería con arcos que datan del s. XV.

Muy cerquita de Mosqueruela se encuentra el pueblo de Puertomingalvo, uno de los pueblos más bonitos de España y que puede ser el complemento perfecto a tu visita por la zona [lee el artículo dedicado a él pinchando 🖱 aquí].

Edificios característicos del gótico levantino aparecen casi en todas las calles del pueblo. Unos en mejor estado, otros en menor, pero todos de un valor que no sabemos calcular – o que no apreciamos.

El Ayuntamiento es también un edifico a tener en cuenta, ya que data del s. XVII y está formado por dos plantas con lonja de nueve arcos de medio punto, en la fachada cuatro balcones decorados y encuadrados. Como el resto de casas de la época, está hecha en sillería y su cornisa es de madera, rematada en doble alero.

Nos encontramos ahora, lo habréis deducido, en la Plaza Mayor, que se encuentra en lo que era la intersección de los dos principales ejes urbanos de aquella Mosqueruela que nace en el año 1265 como aldea. Junto al Ayuntamiento, la Iglesia, que nos señala claramente que esa plaza – parcialmente porticada – es el centro político y religioso de la localidad.

Mosqueruela deja de ser una aldea como cualquier otra y se convierte en lugar de renombre aumentando su importancia histórica, hecho que se observa en su arquitectura civil. Ya os lo he dicho antes: torres- puerta como la de San Roque, o algunos pares de portales como los del Hospital o de Teruel nos muestran que antes aquello estaba cerrado por una muralla de la que todavía hoy, se conserva buena parte de su trazado.

Mosqueruela es también todo esto:

Es una ventana indiscreta.

Es una calle desierta.

Es una puerta fotificada reconvertida en ermita.

Es el pasar de los años en las fachadas encaladas.

Es un austero lugar para el culto.

Es ropa tendida en el balcón.

Es la simetría de lo de antaño.

Es el cableado vigilante en lo alto.

Es una mano amiga que te dice: quédate.