Alsacia es una región francesa de cuento. Punto. No se puede decir más. Es que cualquier pueblo alsaciano, por poco conocido que sea, tendrá elementos que te harán creer que estás metido en una película de fantasía, de esas en las que aparecen ogros, princesas y caballeros, dragones y algún brujo malo. Sin duda un viaje a Alsacia no te defraudará, y aquí te cuento cuál fue nuestra ruta de 3 días por esta parte tan maravillosa de Francia.
Cuando planteé el viaje a Alsacia tenía miedo de que llegase a defraudarnos. En mi cabeza me había montado una película de terror con el hecho que las imágenes que había visto tantas veces de ese pedazo de Francia fuesen nada más y nada menos que una buena toma, un buen encuadre, una buena fotografía.
Soy bastante escéptica cuando viajo, voy siempre a la defensiva – lo he contado otras veces -, no me fío de muchas cosas y siempre quiero experimentar por mí misma – será defecto de filósofa, yo qué sé. La cuestión, que cuando monté el viaje a Alsacia no tenía muy claro que aquello fuese tan maravilloso como contaban. Y llegamos a Alsacia, y yo me paré en el primer pueblo con el juicio en suspenso, y es que transito por el mundo en una especie de estado de epojé permanente. La realidad me dio un bofetón enorme y el juicio hizo su trabajo. Si todos los pueblos eran como aquel, Alsacia sería una locura.
Y sí, Alsacia acabó siendo una locura. Allí está todo tan cerca, es todo tan bonito que a veces crees estar en un decorado de película. Y sí, lo parece y puede que hasta lo sea porque se cuenta que Alsacia fue una de las inspiraciones del sacrosanto Walt Disney a la hora de dibujar algunos de los lugares en los que se desarrollaban las historias que contaba. Y claro, en nuestro imaginario colectivo tenemos grabado que un pueblo de cuento es, por ejemplo, Eguisheim, la fuente del cual dicen que es la que aparece en La Bella y la Bestia. La belleza es un constructo social, sin ninguna duda, y en el marco social en el que vivimos Alsacia es sinónimo de belleza sin duda alguna.
No te voy a hacer aquí una lista de los pueblos alsacianos que no debes perderte, lo que te vas a encontrar en este artículo es nuestro paso particular por esta región francesa que tan deseada es por los viajeros. Y sí, razones para ello las hay, y a raudales.
¿Cómo llegamos a Alsacia?
Hay muchos modos de llegar a Alsacia. En realidad los modos son los mismos que te pueden llevar a otro lugar. Es posible llegar en avión hasta Estrasburgo, pero el viaje sale bastante caro y con escalas de por medio (me sale por casi 400 euros ir y volver desde València y con una duración de viaje de 17 horas). Si vuelas hasta Frankfurt el vuelo te puede salir directo aunque si no encuentras oferta tampoco será barato y, claro, después tendrás que ir hasta Estrasburgo (como mínimo). Puedes, tal vez, viajar hasta Luxemburgo – que suele tener vuelos baratos – y desplazarte también en tren hasta Estrasburgo. Aunque leyendo por internet lo más barato es viajar hasta Basilea, en Suiza, aunque el aeropuerto es internacional porque pertenece a Francia, Alemania y Suiza. Eso sí, el tema aviones sale a cuenta si vives en una gran ciudad; si vives en un pueblo como nosotros desplazarte hasta el aeropuerto a veces supone un gasto extra bastante elevado.
Puedes llegar en tren, haciendo un trayecto hasta, por ejemplo, París y desde allí hasta Estrasburgo. El precio del viaje te saldrá más o menos por unos 350 0 400 euros.
Puedes llegar, también, en vehículo propio, que es lo que hicimos nosotros – el viaje era en furgo – y que te saldrá, a precios actuales de gasoil, por menos de lo que cuesta un viaje en tren, teniendo en cuenta que vamos subidas dos personas, por lo que te saldrá, como mínimo, por la mitad.
¿Dónde me alojo en Alsacia?
Mientras estábamos de viaje había gente que me preguntaba via Instagram cuáles eran los lugares que recomendaba como alojamiento en Alsacia. Como he dicho en el párrafo anterior, nuestro viaje es en furgo, por lo que nos alojamos en ella (después hablo un poco más sobre esto), así que solamente puedo dar consejos al respecto.
Si te gusta la tranquilidad yo no buscaría quedarme en los pueblos más conocidos de la zona. ¿Por qué no haría esto? Porque a no ser que viajes en temporada baja esos lugares van a estar llenos de gente a casi todas horas. Siguiendo la condición de tranquilidad, tampoco me alojaría en Estrasburgo o Colmar por ser lugares de mayor tamaño y, por lo tanto, menos tranquilos. Buscaría, por lo tanto, cualquier pueblo menor dentro de la ruta de los pueblos de Alsacia, y desde allí me iría moviendo (Andlau o Hunawihr, por ejemplo).
Si lo que quieres es movimiento de gente y vida en las calles te recomiendo Colmar y Estrasburgo, también Obernai. Pero ten en cuenta que excepto el tercero las localidades son bastante grandes – más Estrasburgo, claro – y si viajas en vehículo propio el ir y venir te va a suponer bastante tiempo por el tema tráfico y aparcamiento.
Sigamos. Te recomiendo buscar dos puntos de alojamiento distintos, que yo resumiría en Colmar – o alrededores – y Estrasburgo – o alrededores. Aunque la distancia entre un punto y el otro no es muy grande, cierto es que ir y venir al final se te hará pesado – aunque haya buenas carreteras.
En nuestro caso empezamos la ruta por el sur, por Eguisheim, y terminamos en el norte, en Estrasburgo, pernoctando en tres sitios distintos: a inicio de la ruta, cerca de Eguisheim, a mitad de la ruta, cerca de Haut-Koengsbourg, y al final de la misma, cerca de Estrasburgo.
¿Y si viajo en furgo?
Si viajas en furgo no lo vas a tener difícil a la hora de pernoctar en Alsacia, ahora bien, siempre que viajes en temporada baja. Si lo haces como nosotros – a mediados de junio – no tendrás problema por dormir en las pocas áreas de autocaravana gratuitas que hay o en otros espacios de naturaleza donde se permite la pernocta – o no está estrictamente prohibida.
Si tu furgo es más apoteósica que la nuestra – y seguro que lo será – debes saber que en muchos de los pueblos más turísticos hay espacio para estacionar las furgos y autocaravanas – de pago – y que suelen ofrecer todos los servicios que demanda un vehículo como estos: vaciado de aguas negras y grises, enchufe de electricidad y también de agua. Los precios de estos aparcamientos suelen estar entre los 10 y 15 euros.
Si quieres pernoctar por libre ten en cuenta que hay lugares en los que está estrictamente prohibido, pero en los que no no vas a tener problema.
¿Dónde dejo el vehículo?
Si viajas en vehículo propio tendrás que dejarlo en algún lugar. La mayoría de los pueblos más turísticos tienen aparcamiento de pago que ronda los 4€ de media, aunque algunos son más caros y otros más baratos. A partir de las siete de la tarde no se suele pagar, y si no hay mucha gente puedes encontrar aparcamiento en algún lugar en el que no debas pagar.
En las ciudades puedes dejar el coche en zonas un poco más apartadas pero gratuitas. Es lo que hicimos en Estrasburgo, dejando la furgo cerca de la estación de tren de las afueras, y en Colmar buscamos una zona a unos 10 minutos a pie del centro donde el aparcamiento era gratuito. No estará de más que te hagas con el circulo azul para poder aparcar en las zonas gratuitas – te hablo de él en el artículo sobre Suiza – y que sirve como controlador de tiempo. Yo te puedo asegurar que aparcar gratis se puede, aunque en algunos lugares es más difícil que en otros.
¿Cuántos días necesito para visitar Alsacia?
Aquí me pillas. No sabría qué decirte al respecto. Nosotros lo hicimos en tres día con sus tres noches, pasando casi un día completo en Estrasburgo. No sabría qué decirte porque al viajar en furgo el tiempo se invierte de forma diferente. Si hubiésemos viajado hasta allí a la manera tradicional, te recomendaría 5 o 6 días para no agobiarte.
También puedes visitar Alsacia en menos tiempo, claro. Si solo tienes un fin de semana puedes llegar hasta allí y pasar por los 4 o 5 pueblos más top de la zona – incluyendo Colmar y Estrasburgo. Ahora después te hablaré más extensamente de nuestra ruta por Alsacia para que veas de qué te estoy hablando.
¿Cuánto prespuesto necesito para viajar a Alsacia?
Pues puedes ir desde lo más básico, como es nuestro caso, gastándote dinero en transporte y algo de comida y muy pocas entradas, o gastarte todo lo que quieras. Los alojamientos que vi en Alsacia – fuera de buscadores – estaban entre los 70€ habitación doble por noche – algunos con desayuno -, pero puedes encontrar habitaciones por 50€ la noche si buscas bien. Así, si viajas 5 días – con sus cuatro noches – y sois dos personas, el alojamiento te saldrá, como mínimo, por 200€.
El transporte es también esencial en Alsacia. Como ya sabes – y te he dicho antes – nosotros viajamos en furgo, que era a la vez nuestro alojamiento – y nuestra cocina si era menester. Sí, lo sé, nosotros podemos hacer eso porque tenemos furgo – aunque sea muy básica – y somos solo dos, así que solo necesitamos un colchón donde reposar nuestros cansados cuerpos. Es difícil viajar como nosotros si eres, por ejemplo, una familia con niños o adolescentes. Ahora bien, te recomiendo que si te pica la curiosidad – y esto es un offtopic alsaciano – pruebes esto de viajar en furgo y si te gusta que inviertas en una – puede ser una caravana de segunda mano, yo qué sé, hay muchas opciones – que se adapte a tus necesidades básicas. Viajarás más, y mejor.
Volvamos al transporte. Desplazarte hasta Alsacia no será barato, aunque dependerá de la época en que viajes y la antelación con la que busques el viaje. Si vas en coche esto da igual, dependerá el gasto de lo caro que vaya el combustible en esos días. Una vez estés allí lo que yo te recomiendo es que alquiles un coche (acabo de mirar y te saldría por unos 90 euros al día) ya que es la mejor manera de visitar todos los pueblos y paisajes alsacianos. Aunque a algunos llega el transporte público la experiencia nunca va a ser igual. El tren lo puedes usar, pero de una localidad grande a otra – no hay estación de tren en Andlau, por ejemplo. En definitiva, que lo mejor para hacer un viaje a Alsacia es usar el vehículo por carretera.
Así, desplazamiento hasta Alsacia (dos personas para julio), más el alojamiento más el vehículo alquilado te saldrá por unos 1.200 (cosa que me parece una barbaridad). Nosotros no nos gastamos eso en 15 días de viaje, ya os lo puedo asegurar. Si encuentras vuelos baratos, obviamente, el presupuesto se va a reducir notablemente, pero ten en cuenta que menos de 300 euros por cabeza – y haciendo el viaje muy muy low cost – no te los va a quitar nadie.
Para desplazarte por las ciudades – principalmente Colmar y Estrasburgo – tienes el transporte público pero si puedes, ve a pie. Ni Colmar es grande, ni tampoco lo es Estrasburgo. Nosotros dejamos la furgo aparcada cerca de la estación de tren, en las afueras de la ciudad – donde había sitio gratis de aparcamiento – y hasta el centro de la misma no había más de 20 minutos a pie. Después todo lo que visitamos – hasta el Parlamento Europeo – lo hicimos a pie. Si te gusta andar lo mejor es que te pongas unos buenos zapatos y disfrutes de la ciudad a pata.
Comer en Alsacia
Otra parte importante del presupuesto es qué comemos No sé si sabrás que nosotros llevamos en la furgo un pequeño fogón de esos de toda la vida, de los que seguramente has usado en tu niñez, y que a día de hoy funciona sin problemas. Lo llevamos en la furgo pero también lo hemos llevado en coche, así como en coche hemos hecho también picnics. El cocinarnos nosotros las cosas, o calentarlas – porque a veces la comida es de lata – nos permite ahorrar mucho en el presupuesto.
Ahora bien, si lo que te apetece es probar la comida alsaciana tampoco te va a salir muy caro – a no ser que quieras beber vino o cerveza. En Alsacia son típicos los pretzel, que los tienes por un euro en cualquier panadería – sí, de pretzel no se vive, pero qué buenos que están -, y también la flammkuchen, una torta muy parecida a la pizza pero que lleva nata en la base y bacón y cebolla en su forma más sencilla. Esto, la flammkuchen, te puede salir por unos 7 u 8 euros, e incluso menos si pillas hora feliz en Estrasburgo como nosotros la pillamos en un bar, el Au Brasseur, que tiene hora feliz por las tardes con las cervezas de medio litro a precio de las de 25 cl (esto serían unos 3,5 euros) y las flammkuchen (o tarte flambée en francés) por 3,5€. Sin duda es una opción a tener en cuenta ya que la cerveza es muy buena, el local muy chulo, y la comida no está nada mal – fuimos a comer y nos gustó tanto que acabamos allí en la hora feliz del mismo día.
Y ya que me he puesto a hablar de cerveza, decirte que las cervezas en los bares no son nada baratas – menos de tres euros va a ser difícil verlo, y por 25 cl de cerveza –, pero sí es cierto que en lugares como Estrasburgo existe la hora feliz que suelen ser un par de horas por la tarde donde la cerveza está a mitad de precio, así como las bebidas soft, que tampoco son nada baratas. De hecho, lo caro en Francia no es comer sino beber.
Digo esto porque en Francia, y por lo tanto también en Alsacia, existe lo que se conoce como formule midi e incluso puedes ver hasta menú du jour y que consta de un entrante, primer plato y postre y puede rondar los 15€. La comida suele ser casera y de calidad, y no necesitas tomar bebida si no quieres ya que allí te sacan la botella de agua – del grifo – gratis. Además de estás fórmulas y menús lo normal es que pidas un plato consistente y ya está, que puede rondar entre los 10 y 15€, y no te vas a quedar con hambre. Así, si te apetece probar la comida típica alsaciana seguro que lo podrás hacer sin gastar demasiado dinero, eso sí, fuera de los núcleos más turísticos. Mi consejo para comer bien y a buen precio en Alsacia es que pares a comer en los pueblos menos conocidos de la región. Nosotros hicimos eso y comimos de lujo por unos 15 € por cabeza en un local de lo más auténtico rodeados de gente local.
Si tienes que tirar de supermercado, los productos allí no son demasiado caros. Los precios no difieren mucho de los de España y siempre puedes encontrar ofertas. Cuando visitamos Francia – bueno, y cualquier otro país – acabamos paseando por los supermercados, ya no por comprar sino porque a mí personalmente es algo que me gusta hacer, por la variedad de productos que hay, y también porque me parece que el supermercado define mucho a la sociedad. La cuestión, que a veces nos pasamos bastante rato en ellos y hemos descubierto que los E. Leclerc suelen ser bastante económicos – y tienen muchísimos productos que no vas a encontrar en España. Además, allí te puedes hacer una tarjeta donde acumular dinero de ofertas. Yo me ahorré algunos euros sacándomela en el mismo supermercado y llevándola en el teléfono.
¿Cuánto me van a costar las entradas?
Voy a decirte que nosotros solo nos gastamos 9€ por cabeza en el castillo de Haut-Koenigsbourg y todo lo demás que visitamos fue gratis, aunque tampoco os creáis que hicimos muchas visitas a museos y cosas así. Las catedrales e iglesias que visitamos eran gratuitas – como todas las catedrales e iglesias que hemos visitado en Francia – y la otra visita que hicimos, la del Parlamento Europeo en Estrasburgo, era también gratuita.
Como ves, poco nos gastamos en entradas, pero es que en realidad Alsacia es tan espectacular que no necesitas acceder a ningún espacio museístico o monumento para disfrutar del destino. Pero si quieres saberlo, las entradas van de los 6 euros hasta los 12.
¿Qué visitar en Alsacia?
Bien, tenemos ya nuestro presupuesto montado, que puede rondar entre los 300 euros por persona como mínimo – y ajustando mucho – hasta lo que te quieras gastar – como siempre –, y ahora queremos saber qué vamos a visitar en Alsacia. Puedo decirte que yo tenía muchas cosas apuntadas antes del viaje y al final solo nos dedicamos a visitar los pueblos de la ruta del vino en Alsacia, que es una ruta casi lineal que va desde Egusheim hasta Obernai y que discurre por carreteras secundarias con los Vosgos a un lado y los viñedos dominando todo el espacio.
Esta ruta, como digo, es lineal y nosotros la hicimos de sur a norte ya que después nos íbamos a la Selva Negra, y no nos quedamos en Obernai sino que llegamos a Estrasburgo, que visitamos en día y medio.
Nos basamos, esencialmente, en la ruta de los vinos de Alsacia, no porque quisiéramos disfrutar de las bodegas y los vinos alsacianos – que son deliciosos, por otra parte – sino porque es una ruta que está muy bien estructurada, que aparece en muchas guías de turismo y que concentra en poco espacio lo esencial de la región. Esta ruta se puede hacer al completo, pero puedes también hacerla por partes. Al final te hablaré de esto.
La ruta, desde sur a norte, suma un total de 80 kilómetros en línea recta, así que imagina lo cómodo que es hacerla por carretera – que es lo que te recomiendo ya que creo que es como más se disfruta. A partir de ella puedes salir tangencialmente y visitar otros espacios como los Vosgos, o el Valle de Münster, así como la Línea Maginot (que se nos quedó pendiente), el campo de concentración Natzweiler-Struthof u otros atractivos relacionados con la historia más reciente que existen en la región. Yo tenía planificado visitar algunos de esos sitios pero al final nos los saltamos porque no nos apetecía hacer esas visitas.
Habiendo hecho estas precisiones, ahora puedo ya hacerte la lista de los sitios que visitamos en nuestra ruta del vino por Alsacia:
Ruta de pueblos y ciudades en Alsacia
1. Eguisheim
Con que te mencionase el pueblo creo que ya sería suficiente. Eguisheim es el pueblo modelo de los pueblos alsacianos. Es el pueblo que dicen inspiró parte de los escenarios de La Bella y la Bestia, siendo la fuente del pueblo la que aparece en la película de animación. Lo cierto es que no sabría qué deciros, y muchas de las fuentes que te encuentras por Alsacia – y también por la Selva Negra – bien podrían haber servido para lo mismo.
Dejando las anécdotas de lado, Eguisheim es un pueblo precioso, la carta de presentación de Alsacia en esta ruta, siendo uno de los más bonitos que te vas a encontrar en la ruta, pero no el más bonito.
La iglesia, Le Pigeonnier, esa casa de palomas que es carta de presentación de la localidad, la plaza, sus calles circulares… Cualquier de Eguisheim te va a enamorar; el pueblo no tiene desperdicio.
Para aparcar en Eguisheim debes pagar 4€, independientemente del tiempo que vayas a estar, aunque si llegas después de las 7 de la tarde el aparcamiento es gratuito.
2. Colmar
Colmar ya no es un pueblo, param mí es una ciudad pequeña, pero su centro histórico es tan bonito como el pueblo anterior. La pequeña Venecia, las casas de entramados, los tejados picudos, las viviendas con frescos, las flores, madera y agua hacen del centro histórico de Colmar una delicia.
La Navidad está presente en Colmar en cualquier época del año y allí puedes comprar souvenirs a precios desorbitados, pero los puedes comprar: un deetallito para el árbol, algo para decorar la puerta, papanoeles, renos… Si te gusta el ambiente navideño en Colmar lo sentirás hasta en plena ola de calor.
Allí puedes encontrar también una réplica de la Estatua de la Libertad, en una rotonda en las afueras, ya que Bartholdi era de allí.
3. Kaysersberg
Para mi uno de los pueblos más bonitos de nuestra ruta por Alsacia, sin ningún tipo de duda. Una vez aparcas – también es de pago – y te adentras en el casco histórico no sabes si estás en un mundo paralelo de fantasía o qué. Las casas de colores, los puentes, las flores, el cielo azul… todo parece irreal.
Además tiene el plus del castillo que forma la estampa perfecta, con las montañas verdes en el fondo. Kaysersberg te va a encantar y no te lo puedes saltar por nada del mundo. Además allí vas a desconectar un poco de la viña alsaciana, que va a estar presente casi en toda la ruta.
4. Kientzheim
A pocos kilómertros de Kaysersberg – y puedes llegar andando si te da la gana – se encuentra Kientzheim, donde la viña se vuelve a hacer presente. Este pueblo no es tan bonito como los tres anteriores, pero eso no quiere decir que sea feo, y es que mantener el nivel de belleza en toda la ruta es tarea complicada.
En Kientzheim el vino es el rey, y las bodegas se suceden unas tras otras en un pueblo realmente pequeño, de una calle apenas, pero también con mucho encanto. Además, tiene muralla y guarda las puertas de entrada a la antigua fortaleza. Y aparcar allí es gratis, y te puedes echar hasta la siesta en tu vehículo si es que te apetece. Ah, y extramuros tiene una zona de merendero donde puedes comer o descansar.
5. Riquewihr
Cuando crees que no podía haber cosa más bonita que Kaysersberg, Egusheim o Colmar, vas y llegas a Riquewihr y te das con un canto en los dientes. En medio de viñedos que se deslizan por la ladera como una colada de lava ordenada, este pueblo alsaciano es otro de esos pueblos de cuento, con sus murallas, sus puertas, sus torres, sus casas de colores, sus callejones, su todo lo necesario para dejarte con la boca abierta.
La torre des Voleurs, la antigua cárcel – si quieres acceder debes pagar -, el Dolder, esa torre que en la parte interna de la fortaleza es de lo más mona y agradable pero en el exterior tiene un carácter defensivo y amenazador. Las casas de colores. También más casas de colores. ¿He dicho ya que hay casas de colores? Qué locura con Riquewihr, de verdad.
Cuando subes por al calle que va de la plaza donde está el Ayuntamiento hasta la torre Dolder no sabes dónde mirar. Todo es bonito, todo está bien situado. Como un cuento, sí.
6. Hunawihr
Este pequeño pueblo, también entre viñedos, tiene encanto y una iglesia fortificada que es, a la vez, católica y protestante. Claro, Alsacia ahora era francesa, ahora alemana, ahora medio excusa para una guerra. Y eso se siente en Alsacia, y aunque este artículo no quiera ser un estudio sobre Alsacia esto sí te lo debo decir, porque encontrarás iglesias católicas y protestantes en casi todos los pueblos, y en este en concreta una que sirve por dos.
El pueblo, como digo, tiene encanto – pero no es de los más bonitos – aunque desde lo alto de la iglesia – o desde el cementerio, más bien – se tienen unas vistas de Alsacia impresionantes.
7. Ribeauvillé
Esta localidad es de mayor tamaño que las anteriores, pero tienes sitio para aparar gratis en las afueras, frente a un parque. Desde allí partes hacia la zona peatonal del pueblo y vas subiendo, subiendo, hasta que llegas a la parte antigua y te encuentras con otra cucada de pueblo.
No será este pueblo de los más bonitos de la zona, o tal vez no tenga tanto encanto como algunos anteriores por ser de mayor tamaño, pero que una parada y un paseo hasta lo alto valen la pena, eso está más que claro.
8. Bergheim
Bergheim tiene viñedos, murallas, casas bonitas y muchas flores. Además, tiene lo que se conoce como El jardín de las brujas (sorcières en francés), un rincón bonito escondido entre las casas. La plaza del mercado, con su fuente en el medio, o la torre del s. XIV conocida como Puerta Alta (o Porte Haute en francés) son los mayores atractivos de este pueblo.
Pero además es un lugar bastante tranquilo en el que te recomiendo quedarte a dormir si lo que quieres es apartarte del bullicio de otras localidades alsacianas.
9. Haut-Koengsbourg
Llegamos al que es el monumento más visitado de Alsacia – o eso cuentan las estadísticas. Una fortaleza situada en la cima del monte Stophanberch y que fue destruido en una de las guerras que asolaron la región.
Hacia 1900 fue reconstruido por órdenes del Emperador Guillermo II de Hohenzollern. La nueva fortaleza es inaugurada en el año 1908 – en aquel entonces es todavía Alemania – y años después se convertirá en el monumento más visitado de la región.
La visita al castillo vale la pena, y mejor si coges audioguía para entender lo que supone no solo ya para Alsacia, sino para Francia en general. Debes tener en cuenta, y como te he dicho antes, la situación de conflicto casi permanente en la que se encontraba esa región hasta no hace mucho.
La restauración, que intenta respetar la estética y funcionalidad de un castillo en el siglo XV, da el pego y en realidad no parece que estés paseando por un castillo reconstruido. La visita, a mi juicio, vale mucho la pena e invertirás en ella un par de horas. Además, desde el castillo hay unas vistas impresionantes que te permiten ver hasta la Selva Negra.
10. Dambach-la-Ville
Dambach-la-Ville es otro de esos pueblos alsacianos poco conocidos que tiene mucho encanto. Rodeado del viñedo más grande de Alsacia (casi 500 hectáreas), guarda todavía puertas de la muralla en forma de torres, casas de entramados, fuentes con flores y todo eso que vas encontrándote en todos los pueblos alsacianos.
Cabe decir que después de Haut-Koengsbourg los pueblos dejan de ser algo franceses para ser algo más alemanes, algo más parecidos a los pueblos que puedes encontrar, por ejemplo, en la Selva Negra.
11. Andlau
Andlau parece más alemán que francés. La estética es totalmente distinta al resto de los pueblos que hemos visto hasta ahora, los tejados dejan de ser picudos y se convierten en planos y anchos, y algunos de sus edificios recuerdan más a los Países Bajos que a Francia.
Lo más interesante de Andlau es su abadía que data del siglo IX aunque está muy reformada. Creo que este pueblo fue el que menos nos emocionó, pero no por ello es menos interesante y, como vengo diciendo a lo largo de todo el artículo, los pueblos están muy cerca unos de otros y no te sabe mal desplazarte un poco más o un poco menos para llegar a ellos.
12. Mittelbergheim
Este es uno de los pueblos más bonitos de Francia, y supongo que sus razones tendrán aunque nosotros no las encontramos. Cierto es que sus casas renacentistas son singulares, junto a las prensas de vino y todo lo que rodea a la producción de caldos, y también la gran cantidad de cigüeñas que se reparten por la localidad. Más allá de eso nosotros no sabemos encontrarle la gracia, o puede que sea porque ya estamos cansados. No lo sé. Te dejo que pases tú por allí y me digas qué te parece.
13. Barr
Este pueblo parece un pueblo más, con una zona mucho más moderna, pero al adentrarte en sus calles te das cuenta que tiene también mucho encanto, con el río escondido entre las casas, las fachadas de entramados, las plazas, las calzadas de piedra y las flores.
Además en Barr tomamos un café con leche a un precio decente y de un tamaño considerable.
14. Obernai
Obernai es también una localidad de dimensiones considerables, pero con un centro histórico súper chulo. La plaza del mercado, el mercado de grano, la fuente Santa Odila – la patrona de Alsacia nació allí -, el Ayuntamiento o sus murallas son los encantos de esta localidad que tampoco tiene desperdicio.
Nosotros la visitamos en plena Fête de la Musique y había un ambientazo tremendo, así que nos llevamos de esa localidad un muy grato recuerdo.
Y en Obernai es donde termina la ruta de los pueblos propiamente dichos, aunque no es el final de nuestro recorrido.
15. Estrasburgo
En último lugar visitaremos Estrasburgo, capital de Alsacia. La ciudad es asequible para recorrer a pie – como te he dicho en apartados anteriores – y es muy agradable, además de preciosa. La Catedral de Estrasburgo es una de las más impresionantes que he visto últimamente y su casco histórico, con la Pequeña Francia y todas las callejuelas, no tiene despserdicio.
Además, es un buen lugar donde probar la cerveza por el tema de la happy hour que hay todos los días en muchos locales de la ciudad, y puedes acceder también de forma gratuita a las instituciones europeas como el Parlamento de Estrasburgo o el Consejo de Europa.
Sin duda en esta ciudad debes pasar, al menos, una jornada completa para disfrutar de sus encantos, y si realizas una visita guiada (como esta de Gurú Walk) vasa conocerla mejor. Aunque yo la veo perfecta para pasar un fin de semana allí completo, sin salir de la urbe y sin aburrirte.
La ruta por Alsacia de un vistazo.
Aquí finaliza nuestra ruta por Alsacia – pero no nuestro viaje, que durará 15 días y nos llevará por distintos países europeos. Siendo muchos los atractivos que ofrece esta región francesa, los que te muestro en la lista anterior son los que nosotros visitamos. La ruta no la teníamos hecha desde un principio o, mejor dicho, no había una ruta cerrada. Fuimos visitando según nos apetecía y lo que aparece aquí es lo que salió.
Como te he dicho antes, hubiéramos podido visitar otros lugares, otros pueblos, incluso otras ciudades – como Mulhouse – pero era lo que nos apetecía en ese momento. Tampoco fuimos al Monte Santa-Odila, lugar sagrado para los alsacianos por ser esa santa su patrona.
Esta es nuestra experiencia e intentando transmitir lo que nosotros sentimos allí, de la forma más sincera posible. Que a mí me haya gustado – o no – un lugar no quiere decir que deba gustarte – o no a ti, pero sin duda hay sitios en Alsacia que son excepcionales y para mí la mayoría se encentran en el Bajo Rin, en la primera parte de la ruta, hasta llegar hasta el castillo de HautLoengsbourg. Por lo tanto si no dispones de mucho tiempo selecciona los pueblos 1, 2, 3 y 5 y tendrás todo lo que quieres de Alsacia. Bueno, y también Estrasburgo, pero entonces ya tendrás que dedicarle más tiempo.
Vuelvo a repetir que esta no es una ruta definitiva por Alsacia, es la ruta que nosotros hicimos y así te la comparto. No es mejor ni peor que otras rutas, y te aconsejo que recopiles toda la información posible antes de formar la tuya, para saber qué es lo que te vas a encontrar.
Para tal fin te dejo aquí unos enlaces que creo te serán de utilidad:
▫Página de turismo oficial de Alsacia
▫Página de turismo oficial de Estrasburgo
▫Una web sobre Alsacia (en francés) que recopila muy bien todos los pueblos de la región.
Espero haberte animado a visitar Alsacia, seguro que como nosotros acabas encontrando la forma de hacerlo. Deseo que puedas desplazarte hasta esta región francesa porque, sí, Alsacia es única y muy bella,
En Estrasburgo, un lugar
para comer a buen precio, es en el restaurante universitario, está en el centro, y a precio universitario, y también si no eres muy exquisito con la comida.
Gracias por el apunte, seguro que a las personas que estén preparando su viaje a Estrasburgo les va a venir de perlas.
Nosotros exquisiteces con la comida… pocas XD
Muy buena entrada, os felicito.
Hace unos años viajé dese Algeciras (Cádiz) hasta Linz en Austria, por lo que tuve que atravesar obviamente Francia. Pero como buen estudioso de la historia, quise pasarme por unas zonas francesas con tanta historia como Alsacia y Lorena, aunque hice más hincapié en Alsacia. Y uno de los puntos en los que hice más parada fue en la Línea Maginot. Podría escribir 9 folios a mano sobre esa zona, pero si lo escribo aquí o bien el servidor colpasa o me impedís escribir más comentarios aquí jaja.
Ya en serio, muchas gracias por el relato de esta entrada. Me lo apunto para cuando visite Alsacia con más tiempo y dedicación.
¡Jajajaja! Yo no te impediría escribir más comentarios, me gusta que la gente me enseñe cosas y debata conmigo 🙂
Alsacia es fantástica, espero que puedas volver pronto.
Un saludo,
Marina.
Vamos en una semana a la zona. Estoy «repasando» el planning con lo que habeis escrito en la entrada del blog…
Espero que te sirva lo que contamos y que puedas hacer tu viaje más cómodo 🙂
Buenas tardes: no sé si sería posible que me indicases el «timing» del viaje, los pueblos que visitasteis cada día, para hacernos una idea más aproximada de qué visitar. Estoy inmersa en la organización del viaje con unos amigos (3 días por Alsacia y otros 3 por Selva Negra – iremos antes a Selva Negra, he leído también vuestro viaje por ella y creo que es mejor ese orden para no comparar tipos de pueblos) y al consultar diferentes blogs veo diferentes «recomendaciones» y me estoy «aturullando» con tanta información (estoy basándome más en el vuestro, me encantan tus explicaciones y el enfoque del viaje).
¡Muchas gracias!
Es normal que pasen esas cosas, porque a mí me pasó lo mismo… XD
A ver, respecto al «timing» para visitar los pueblos: no teníamos nada programado. Hicimos según íbamos viendo, esto es, cuando creíamos que habíamos visto todo nos íbamos a otro. Así, tardamos unos 3 días en hacer la ruta porque, como menciono, es lineal y muy cómoda de hacer, porque hay pueblos que están a muy pocos kilómetros unos de otros. Mi mejor consejo es que te dejes llevar, no puedo decirte dónde debes quedarte más o menos, dependerá de tus gustos.
Respecto a lo de la Selva Negra, es una zona difícil de visitar, si la comparamos con Alsacia. A mi juicio, son dos viajes muy diferentes y el territorio alemán es mucho más amplio (o disperso) que el francés. Si tuviera que volver a hacer el viaje, la Selva Negra la visitaría de otra manera, pero para ello se necesitan bastantes días.
Me alegra que te guste mi enfoque y que te sirva de ayuda. Espero que puedas construir tu itinerario, que deberá ser lo que te apetezca basándote en todo aquello que más te guste de lo que contamos quienes ya hemos estado allí.
Un abrazo.
Muy bueno vuestro articulo pero necesitaría me aconsejaseis en este tema:
Iremos en agosto en autocaravana. No acabamos de decidirnos si llevarnos motocicleta o unas bicicletas para poder movernos por allí.
La idea es acampar en algun camping y recorrer la zona sur y después la zona norte. Son muy empinadas las carreteras o se puede ir en bicicleta de un pueblecillo a otro?? O creéis que es mejor movernos en motocicleta??
Gracias
Las carreteras son llanísimas, así que sin problema, hay mucha gente que hace esta ruta en bicicleta.
Lo de dejar autocaravana en algún camping, si queréis hacer toda la ruta en bici, es buena idea. Si os gusta el tema de los pedales yo creo que es una muy buena opción. El lugar, como digo, es muy llano, creo que es muy buena idea.